Buenos dias. Hace 29 dias fallecio mi hijo. Tenia 6 años. Es un momento demasiado dificil en mi vida

Ante todo, reciba usted mis condolencias. Y no lo digo por cumplimiento, sino porque al leer su pregunta sentí una viva punzada en el pecho, junto con una sensación opresiva y un nudo en la garganta. Dicen los antiguos que las penas pequeñas hablan, pero las grandes callan. ¿Qué dolor puede ser peor que la pérdida de un hijo, y especialmente si es un niño? ¿Qué hay que pueda dejar a un padre más desolado y aturdido?Yo tengo una niña de seis años, y nada hay que me cause más horror que imaginar o soñar su muerte. Tuve una paciente que había perdido una niña a causa de un tumor cerebral, y para mí era muy difícil contenerme a mí mismo cuando me hablaba de eso. Sin embargo, era necesario para ella hablar del asunto con alguien que la escuchara con genuino interés y empatía, para que pudiera empezar a construir un nuevo sentido y significación de la experiencia inenarrable. ¿Por qué? Porque un dolor así es necesario vivirlo en toda su magnitud, no intentar adormecerlo con drogas o negarlo con la conducta, sino dejarlo que llegue hasta el fondo. Ahora bien, es importante tener con quien hablar de ello, a fin de que el objeto perdido (en este caso el niño) no se convierta en una especie de perseguidor interno que no la deje en paz en lo que reste de vida. No hay una sola manera de vivir un duelo como el suyo, y usted debe encontrar su propio camino. Si es usted muy sola, consiga alguien que la acompañe a elaborar esa terrible experiencia. Si le es posible, consulte a un psicoanalista, ya que, en su caso, es necesario hablar, y hablar mucho.

Es una pérdida muy difícil de aceptar y es un proceso en el cuál el dolor y el recuerdo va estar presente, active su red de apoyo familiar , especialmente esa persona más cercana a sus afectos (madre, hermana, etc. ), el acompañamiento de un psicoterapia en este momento es básico para apoyar el afrontamiento del duelo .

Hola, es una pérdida muy dolorosa, difícil de afrontar, es fundamental que acuda a psicoterapia, permita y acérquese a su red de apoyo familiar y social si la tiene, hable de lo que siente, de sus emociones y lo que esto genera, no tenga miedo, ni pena de llorar, de sentir, hable de ello y no se quede solo con el tratamiento farmacológico, acuda a terapia.

Buenas tardes. Mi más sentida condolencia. Además de lo que te han sugerido los profesionales de Doctoralia, te recomiendo activar tu red de apoyo afectivo: Familia, Amistades, pero también es muy importante buscar apoyo espiritual, si tienes alguna creencia religiosa, e iniciar un proceso psicoterapéutico de manejo de duelo. Tengo amplia experiencia en este campo. Si te encuentras en la ciudad de Bogotá, con mucho gusto podré atenderte. Un abrazo.

Ante todo, siento mucho lo que nos comparte. Este es uno de los mayores dolores que un ser humano puede atravesar en su vida. Yo le recomiendo por supuesto que viva su duelo y su tristeza, apenas obvia y natural para esta ocasión. Si luego de mas o menos 6 meses, continúan las dificultades para poder dormir, o comer y continuar con las actividades de su vida, le recomiendo que acuda a un especialista. No sólo se trata de poder comprender el duelo de un hijo fallecido, sino de un niño, que en nuestra sociedad, y nuestras creencias, ya representa un reto a la comprensión de la situación. Posiblemente luego de unos años, esta situación será uno de los más grandes aprendizajes para su vida, pero en este momento, requiere de todos sus recursos para poder entender lo que sucedió y poder continuar sosteniendo el sentido de su propia vida.

hola, gracias por compartir tu experiencia con nosotros. Te recomiendo que busques ayuda psicológica para que recibas estrategias que te ayuden a llevar este duelo.

Buen día gracias por compartir tu dolor, no puedo saber como te estas sintiendo pero puedo decirte que esto que vives hoy es un proceso el cual debes afrontar de la mejor manera posible y es buscando apoyo social con familia cercana si la tienes o con amistades que te permitan dialogar sobre como te sientes y como es tu dolor, también puedes buscar grupos de apoyo de madres que han perdido a sus hijos estos grupos permiten el dialogo sobre el dolor y la magnitud de la perdida, por otro lado si deseas puedes pedir apoyo psicológico puedes encontrar un espacio donde te puedo escuchar sin juzgar, y ayudarte a encontrar un nuevo rumbo para tu vida.

Hola, te invito a que agendes una consulta psicológica conmigo para ayudarte a tratar el proceso de duelo por medio de la terapia cognitiva- conductual que es muy eficaz en este tipo de casos. Estoy a tu disposición cuando me requieras.

Buenos días, entiendo la situación por la que estas pasando, y los síntomas que refieres son producto del duelo por el que los seres humanos pasamos ante una perdida. Te recomiendo iniciar proceso terapéutico para encontrar un ayuda viable y confiable a lo que te sucede. Recuerda que estoy para escucharte, y dispuesta a atenderte, no olvides contactarme.

Me encantaría proporcionarle un fuerte abrazo, supongo que no está de más y que lo está necesitando. Esto la ayudaría a identificar entre otras cosas, lo más importante, que ha perdido un vínculo muy significativo, por lo cual debe elaborar el duelo mediante un proceso psicoterapéutico, que la ayude a encontrar sentido a su existencia de ahora en adelante.

Hola, gracias por escribir. lamento mucho tu pérdida. Si bien es cierto, que el duelo de una ser querido no es fácil y menos en tu situación, quiero que sepas, que se puede ir aprendiendo a vivir cada día. Te recomiendo que busque ayuda psicológica para poder enseñarte nuevas estrategias de afrontamiento ante tu nueva vida. Buscar ayuda es lo más sensato que se puede hacer cuando nos ocurren situaciones que se nos escapan de las manos. Agenda una cita conmigo y trabajemos sobre la mejor manera de elaborar tu duelo y de recomponer tu proyecto de vida.

Hola, ahora que ya estas en un tratamiento farmacológico es muy importante que te permitas ese espacio para asistir a terapia, más allá de aprender a manejar el dolor es primero importante reconocer tu sentir, permitirte expresar, llorar, gritar y de ahí comenzar a trabajar en pro de ello, seria un placer ayudarte en tu proceso, si estas en Cali podría atenderte de forma presencial, si no virtual también es una opción.

Estimada. No hay palabras para aliviar una pena tan grande como la que cuentas. Hay un libro de la escritora Piedad Bonett, lo que no tiene nombre, es el producto de un trabajo de duelo de una madre ante la muerte de su hijo. Con ayuda, de su red, profesional, familiar en algún momento encontrará una forma particular de aliviar ese dolor, poder construir algo con ese dolor tal vez le ayude. Un saludo.

Cordial Saludo, mis condolencias frente a la muerte de su hijo, es un evento traumático, lo primero es realizar un chequeo medico general de su salud y dar inicio a terapia de Psicología, para apoyar su proceso de duelo, buscar redes de apoyo es primordial.

Hola, primero que nada, mis más sinceras condolencias, perder un hijo es uno de esos dolores que nadie le desea a nadie ni alcanza a imaginar a no ser que lo viva en carne propia. El duelo no es un camino lineal, a veces cuando se avanza a una etapa hay retrocesos y como tú lo dices, es normal, lo más importante es tener presente que es tu derecho sentir lo que tengas que sentir y si sigues honrando tu propio sentir, podrás construir algo nuevo teniendo siempre presente que, aunque tu hijo ya no esté, su espíritu y su esencia ahora son parte de ti. No estás sola, puedes buscar apoyo en grupos de personas, con un profesional individual que te respalden a lo largo de tu duelo en el aspecto psicoterapéutico, ya que algo así solo es muy difícil de afrontar. La vida después de algo así nunca vuelve a ser igual pero siempre hay posibilidades escondidas que te pueden encaminar a un propósito aún mayor, pero eso solo el tiempo lo dirá, mi invitación es que te permitas avanzar sin nunca dejar de sentir y nunca cerrarte a las posibilidades escondidas que la vida te puede estar reservando. Te mando mi más sincero y sentido abrazo, para lo que necesites, aquí hay un grupo enorme de profesionales que estamos dispuestos a acompañarte en tu duelo.

Siento profundamente la pérdida de tu hijo. Es completamente normal que estés experimentando una amplia gama de emociones abrumadoras como la desesperación, la ansiedad y la tristeza. El duelo por la pérdida de un hijo es uno de los desafíos más difíciles que alguien puede enfrentar en la vida.
Entiendo que estés buscando formas de sobrellevar este dolor tan abrumador. La terapia puede ser un espacio seguro donde puedas expresar tus sentimientos, recibir apoyo emocional y aprender a lidiar con esta situación tan devastadora. Te animo a considerar la posibilidad de buscar ayuda profesional. Me ofrezco como una posibilidad ya que estoy especializada en duelo y pérdida. Puedo apoyarte para manejar tu dolor y ayudarte a encontrar una forma de seguir adelante.
Además, es importante que te cuides a ti misma en este momento tan difícil. Intenta dedicar tiempo a actividades que te brinden un poco de consuelo y paz, como caminar al aire libre, escribir en un diario o practicar técnicas de relajación. Habla con tu médico sobre cualquier preocupación de salud, incluido el insomnio, y busca opciones adicionales de apoyo si es necesario.

Hola, lo lamento muchísimo. Perder a alguien que amamos es muy doloroso. La ansiedad, el desespero, el llanto, insomnio y falta de apetito e interés son comprensibles y son todos efectos de perder a alguien importante para nosotros. El duelo es un proceso y considero que es importante que puedas encontrar compañía o apoyo en familia o amigos. Así mismo, poder tener apoyo psicológico para poder expresar, nombrar, representar, darle lugar y sobre todo honrar el dolor. Desde este enfoque nos interesa mucho poder traer a la memoria esa persona e irnos acompañando con los recuerdos y vivencias, ese es nuestro más grande apoyo.

Un evento de pérdida es una situación difícil de afrontar, aún más cuando se trata de un ser tan importante. Lo que debe usted saber es que afrontar la situación y sobre todo llegar a la aceptación de la misma, implica tiempo. De igual manera es relevante que usted, adicional a su ayuda farmacológica, inicie su acompañamiento por parte de psicología con el fin de que reciba las herramientas necesarias para llevar de manera adecuada su proceso de duelo.
Un saludo fraternal para usted.

¡Hola!

Me solidarizo con tu dolor, no alcanzo a imaginar lo que puedes sentir, te recomiendo un espacio de psicología que te ayude a elaborar esta pérdida tan importante en tu vida, que poco a poco vayas retomando los hábitos saludables como la alimentación, el sueño reparador, los grupos de apoyo también son de gran ayuda, ojalá enfocados específicamente en la pérdida de un hijo. Deseo de corazón que pronto puedas estar mejor.

Hola, antes que nada decirte que ese dolor que solo tu sientes y comprendes, es directamente proporcional al amor por tu hijo. Y el primer paso para superar ese dolor que cuentas, es recibirlo. Comprender que es parte de un proceso, no de olvido, sino de aceptación de ese dolor que te genera su partida. El dolor es solo un recordatorio de todo lo que lo amas. Un gran abrazo

Tambien llamado duelo no resuelto,es como estar en un estado de tristeza profunda ,dolor y pensamientos constantes acerca de la perdida de tu hijo que no te permiten recuperarte.Despues de un año de la perdida de un ser querido si los sintomas empeoran o se mantienen deberia consultarse a un especialista en duelo/melancolia.Este duelo ocurre con mayor frecuencia en las mujeres y en las personas mayores,los factores de riesgo de entrar en un duelo complicado o melancolia son la muerte inesperada o violenta de un hijo y aun mas si era un niño.

¡Hola!
Gracias por compartir tu experiencia, eres muy valiente.
No tengo palabras para expresar lo que siento por tu pérdida. Considero significativo subrayar que el duelo es un proceso único para cada individuo y no hay un tiempo determinado para sanar, lamentablemente, la pérdida de un hijo es una de las experiencias más dolorosas que una persona puede enfrentar, te recomiendo que te permitas sentir lo que necesites sentir, no hay una manera precisa de lidiar con esto. También, es importante que cuides de ti misma en este momento tan complejo, hablar con un profesional de la salud mental puede ser de gran ayuda para encontrar un espacio seguro para procesar tus emociones. Recuerda que estoy aquí para acompañarte.

¡Hola! gracias por compartir tu dolor y por buscar apoyo en este momento tan difícil. Primero quiero decirte que lamento profundamente la pérdida de tu hijo. Lo que estás viviendo es un duelo inmenso, y es completamente válido sentir el dolor, la tristeza, la ansiedad y el desinterés que describes. Es un reflejo del profundo amor que sientes por él y del vacío que dejó su partida.

La pérdida de un hijo es una de las experiencias más difíciles que puede enfrentar una persona, y cada quien vive su duelo de manera única. No hay un camino único ni un tiempo específico para sanar, pero hay formas de acompañarte en este proceso y encontrar pequeños momentos de alivio.

Es importante que te des permiso para sentir tus emociones, para llorar, para extrañarlo y para expresar tu dolor sin juicios. Tu amor por tu hijo está en cada lágrima y en cada pensamiento hacia él. No te apresures en intentar "superar" este duelo; en cambio, permítete vivirlo día a día.

También puede ser útil buscar apoyo emocional con alguien de confianza, ya sea un familiar, amigo o un terapeuta especializado en duelo, esto puede ayudarte a no cargar sola con este dolor. Compartir lo que sientes con alguien que te escuche con empatía puede ser un gran alivio.

Incluso puedes crea pequeños rituales para honrar su memoria, esto puede ser tan simple como escribirle cartas, crear un espacio especial en casa donde puedas recordarlo con amor o dedicarle momentos del día para hablarle o pensar en él. Estos rituales pueden ayudarte a procesar tu pérdida y a mantener viva su presencia en tu vida de una manera significativa.

Es natural que te sientas desinteresada en las cosas que antes te importaban. No te presiones a "volver a la normalidad" rápidamente. Reconoce que este proceso llevará tiempo y que está bien no tener todas las respuestas ahora. Sin embargo, Aunque ahora el apetito y el sueño puedan parecer imposibles de recuperar, intenta darte pequeñas dosis de autocuidado, como comer algo ligero, tomar un té antes de dormir o salir a caminar brevemente. Cada pequeño paso es importante para reconectar contigo misma.

Puedes considerar pedir apoyo terapéutico. Un terapeuta especializado en duelo puede ofrecerte un espacio seguro para explorar tu dolor y ayudarte a encontrar herramientas que te permitan lidiar con la ansiedad, el insomnio y la falta de apetito.
Quiero recordarte que, aunque ahora todo se sienta oscuro, no estás sola. Tu dolor habla del amor profundo que sientes por tu hijo, y ese amor siempre vivirá en ti. Estaré aquí si necesitas hablar o si quieres explorar más formas de acompañarte en este proceso.

Cordial saludo.

Te acompañamos en tu dolor, es una situación muy dificili por la que atraviesas, la medicación ayuda pero la terapia orienta y clarifica el camino para empezar a abordar el duelo de manera conciente.
Una recomendación que puedes empezar a utilizar, es escribir a la memoria y recuerdo de tu hijo, es duro pero sanador cuando lo haces desde el amor.

La terapia te ayudará en la manera de abordar este dificil momento.

Contactanos o agenda.

Un abrazo fraterno en la distancia.

Buen día, lamento tu pérdida.

Entendiendo el dolor y desesperación que genera la pérdida de un hijo, siento que es necesario que logres tener el apoyo de un profesional como lo es un psicólogo, para poder tener compañía y compartir tu angustia.

Es importante no automedicarse sin tener antes la recomendación de un especialista o psiquiatra, dado a las contraindicaciones de algunos fármacos.

Hola, lamento profundamente la pérdida de tu hijo; no hay palabras que alivien un dolor tan inmenso, pero quiero reconocer tu fortaleza al buscar apoyo en medio de este sufrimiento. El duelo tras perder a un ser amado, especialmente un hijo, puede manifestarse con emociones abrumadoras y síntomas físicos, como los que describes. Aunque el Neurexan pueda ofrecer un alivio temporal, es crucial abordar el dolor emocional con acompañamiento terapéutico para evitar que el proceso se estanque o intensifique. Te invito a programar una consulta, donde podamos crear un espacio seguro para honrar tu dolor, reconstruir poco a poco tu equilibrio y encontrar herramientas que te permitan transitar este camino sin sentirte sola. Estoy aquí para caminar contigo en este momento de oscuridad.

Lamento profundamente la pérdida de tu hijo. No hay palabras que puedan aliviar tu dolor en este momento, pero quiero que sepas que no estás sola y que hay personas que se preocupan por ti y desean ayudarte.

Es completamente normal que te sientas como te sientes. La muerte de un hijo es una de las experiencias más difíciles que una persona puede enfrentar, y el duelo es un proceso complejo y personal. Permítete sentir todas las emociones que surjan, ya sea tristeza, ira, culpa o incredulidad. No hay una forma "correcta" de hacer duelo, y cada persona lo experimenta de manera diferente.

Aquí hay algunas sugerencias que podrían ayudarte a sobrellevar este momento tan difícil:

Busca apoyo:
Habla con familiares y amigos de confianza sobre tus sentimientos. No tengas miedo de pedir ayuda cuando la necesites.
Considera unirte a un grupo de apoyo para padres que han perdido a sus hijos. Compartir tus experiencias con otras personas que entienden tu dolor puede ser muy reconfortante.
Como profesional con experiencia en manejo de duelo, puedo brindarte herramientas y estrategias para procesar tu dolor y comenzar a sanar.

Cuida de ti misma:
Aunque no tengas apetito, trata de comer alimentos nutritivos para mantener tu energía.
Establece una rutina de sueño regular, incluso si te cuesta conciliar el sueño. Si el insomnio persiste, consulta a un médico.
Realiza actividades que te relajen y te brinden un poco de paz, como escuchar música, leer o dar un paseo.
Considera la posibilidad de hablar con tu medico sobre el uso de medicamentos para ayudarte a dormir y para mejorar tu apetito.

Honra la memoria de tu hijo:
Crea un espacio especial en tu hogar con fotos y recuerdos de tu hijo.
Escribe un diario sobre tus recuerdos y sentimientos.
Realiza actividades que te recuerden a tu hijo, como visitar sus lugares favoritos o escuchar su música preferida.

Sé paciente contigo misma:
El duelo lleva tiempo, y no hay un cronograma fijo para superarlo.
Permítete sentir todas las emociones que surjan, y no te juzgues por cómo te sientes.
Recuerda que está bien tener días buenos y días malos.

Recuerda, no estás sola. Hay personas que se preocupan por ti y desean ayudarte a superar este momento tan difícil.

Buenos días. Quiero empezar por decirte que lamento profundamente la pérdida de tu hijo. No hay palabras que puedan aliviar el dolor que sientes en este momento, y es completamente normal que estés atravesando una montaña rusa de emociones. La tristeza, la ansiedad y el desespero son respuestas naturales ante una pérdida tan significativa.

Es importante que te des permiso para sentir lo que estás sintiendo. Llorar y expresar tu dolor son formas de honrar la memoria de tu hijo y de procesar tu duelo. No estás solo en este camino, aunque en momentos pueda parecerlo. Es entendible que te sientas abrumado, especialmente considerando que eran solo tú y tu hijo.

Respecto a las dificultades que mencionas, como el insomnio y la falta de apetito, aquí hay algunas recomendaciones prácticas que podrías considerar:

Rutinas suaves: Establecer una rutina diaria, incluso si es simple, puede brindarte algo de estructura. Intenta fijar horarios para levantarte, comer y dormir, aunque sea difícil.

Escritura emocional: Muchas personas encuentran alivio al escribir sobre sus sentimientos. Podrías llevar un diario donde expreses lo que sientes, lo que extrañas de tu hijo, o incluso recuerdos felices que compartieron. Esto puede ayudarte a procesar tus emociones.

Conexión con otros: Aunque puede ser difícil, intentar conectar con amigos o familiares que puedan brindar apoyo puede ser útil. No tienes que pasar por esto solo. Hablar sobre tus sentimientos con alguien de confianza puede ser un alivio.

Técnicas de relajación: Practicar ejercicios de respiración, meditación o yoga suave puede ayudar a calmar la ansiedad. Hay muchas aplicaciones y videos en línea que pueden guiarte en esto.

Consulta profesional: Considera la posibilidad de hablar con un psicólogo, ya que puede ofrecerte un espacio seguro para procesar tu dolor y emociones. Un profesional puede brindarte herramientas y estrategias personalizadas para que puedas manejar esta etapa de tu vida de una manera más saludable.

Si sientes que esto resuena contigo, me gustaría invitarte a que tomes una consulta conmigo. Estoy aquí para apoyarte en este proceso y trabajar juntos en tu bienestar emocional. No tienes que atravesar esto solo, estoy aquí para ayudarte.

Te mando un fuerte abrazo y espero que encuentres momentos de paz en medio de este dolor.

Hola, lamento mucho leer esto. Esta es una situación demasiado dolorosa de afrontar y puede sentirse como una carga demasiado pesada. En estos casos en particular un profesional de la salud mental es la persona idónea para acompañarte a atravesar este duelo, ya que al revisar tu situación se puede determinar en que etapa del duelo te encuentras y ayudar paso a paso a atravesarlo, lo de la medicación es un tema que te puede ayudar para dormir pero sin orientación médica puede ser un problema. Te recomiendo consultar con un profesional de la salud, yo tengo mi agenda disponible si consideras que quieres dar ese paso.

Te mando un abrazo grande.

Buenos días, muchas gracias por tu pregunta. Te envío un abrazo en este duro proceso, yo suelo decirle a mis pacientes que si una persona llegara a mí tan "enferma" como llega alguien en duelo, yo me preocuparía muchísimo, porque el duelo altera todo, (el sueño, el apetito, el animo, las relaciones sociales, impacta en todas las esferas). Entonces te recomendaría primero, ser piadosa contigo, es una respuesta normal y esperable el estar ansiosa y desconsolada y segundo es importante que puedas tener una red de apoyo que pueda sostenerte y apoyarte en las cosas simples (como el cuidado de ti misma), no sé si pueda existir, una amiga, un familiar cercano y si tienes la posibilidad sería valioso e importante que puedas buscar ayuda psicológica para ir acompañada en este proceso

Hola! Lamento profundamente tu pérdida. Lo que estás viviendo es uno de los dolores más desgarradores que puede atravesar un ser humano: la pérdida de un hijo. No existen palabras que puedan abarcar completamente ese sufrimiento, pero quiero que sepas que tu dolor es válido, comprensible y digno de ser acompañado con el mayor respeto y compasión.

Tu hijo era tu mundo, tu compañía, parte vital de tu proyecto de vida. Y ahora te encuentras en un lugar donde todo parece haberse detenido o perdido sentido. Es normal que sientas desesperación, ansiedad, insomnio, pérdida de apetito y un vacío inmenso. Estas reacciones son expresiones naturales del duelo, especialmente cuando se trata de una pérdida tan profunda y posiblemente repentina.

Lo primero: no estás sola

Aunque ahora todo parezca oscuro, es importante que sepas que no estás sola. Existen personas y espacios que pueden acompañarte en este proceso con sensibilidad y sin juzgar tu dolor. Nada ni nadie puede reemplazar a tu hijo, pero sí puedes aprender a llevar este duelo con más sostén, con contención emocional y sin cargarlo en silencio.

El duelo por un hijo no se “supera”… se transita

Muchas veces la sociedad presiona con frases como “tienes que ser fuerte”, “la vida sigue”, “ya pasará”… pero el duelo por un hijo no es algo que se supere, es algo que se aprende a integrar. El objetivo no es olvidar ni dejar de llorar, sino permitirte vivir tu dolor con dignidad y con apoyo, para que con el tiempo puedas transformar ese amor inmenso en otra forma de presencia y puedas continuar con tu proyecto de vida.

¿Qué puedes hacer ahora para empezar a cuidarte? Aquí te comparto algunas sugerencias que podrías considerar, si en algún momento sientes que estás lista:

Permítete sentir todo lo que sientes: No te juzgues por llorar, por sentir que no puedes, por pensar que el dolor no tiene fin. Estas emociones son el lenguaje del amor que sentías por tu hijo. Llorar no te hace débil: te humaniza.

Busca acompañamiento emocional especializado: Un psicólogo con experiencia en duelo puede ayudarte a caminar este proceso sin que lo cargues sola. También hay grupos de duelo para padres que han perdido hijos, donde puedes sentirte comprendida de una manera que pocas personas logran.

Pequeños rituales de conexión: Muchas madres encuentran alivio en escribirle cartas a su hijo, hacer un diario del duelo, prenderle una vela cada día, o tener un pequeño espacio simbólico donde hablarle. Son formas de seguir amándolo sin negar la realidad de su ausencia física.

Cuidar el cuerpo en lo básico: Dormir, comer algo, respirar con consciencia… aunque sea poco. No necesitas estar “perfectamente”, solo necesitas sostenerte de a poco. El uso de medicamentos debe ser supervisado por un médico que pueda acompañarte desde lo farmacológico si hiciera falta, sin dejar de lado el aspecto emocional que puede ser trabajado con un psicólogo.

Apóyate en alguien de confianza: Si tienes alguna persona cercana —un familiar, una amiga, una figura espiritual— que pueda simplemente estar ahí contigo, sin decir mucho, solo estar, permítete recibir ese sostén.

Querida mamá, no hay tiempos exactos en el duelo. No tienes que apresurarte. Cada día que logras levantarte, cada respiración consciente que haces, ya es un acto de amor, hacia ti y hacia tu hijo.

Y aunque hoy no lo sientas, llegará un momento —no mañana, pero sí algún día— en que el dolor no ocupará todo el espacio. Tu hijo seguirá viviendo en tu amor, en tu recuerdo, y en lo que hagas por ti a partir de ahora. Muy seguramente tu hijo querría verte nuevamente feliz.

Tu dolor merece ser escuchado con respeto y sin prisa. Date la oportunidad de seguir viviendo como mereces. Un abrazo muy cálido, de corazón a corazón.

Lamento profundamente tu pérdida. Perder a un hijo es una de las experiencias más desgarradoras que puede atravesar un ser humano. Como madre, aunque no pueda imaginar tu dolor exacto, puedo sentir la inmensidad del amor que hay detrás de cada lágrima, cada noche de insomnio, cada instante de ausencia.

Todo lo que estás sintiendo es válido. No estás sola. Este duelo no se supera, se atraviesa. Te animo con todo mi corazón a buscar acompañamiento terapéutico, donde puedas tener un espacio seguro para sostener tu dolor, sin juicio, con cuidado.

Hola, buenos días. Te agradezco mucho por abrir tu corazón y compartir el momento tan doloroso y retador que estás viviendo.

Primero como mamá y psicoterapeuta quiero decirte que lamento profundamente la pérdida de tu hijo y desde aquí te abrazo, sé que no hay palabras que puedan describir la magnitud de lo que estás viviendo y sintiendo. Es una pérdida muy importante, además muy reciente y el dolor que expresas es completamente natural, ya que despediste a tu hijo y con él seguramente una parte fundamental de tu vida, de ti y de tu mundo.

En este momento, es completamente esperable que sientas desespero, ansiedad, insomnio, falta de apetito y un desgano profundo. Todo tu ser está intentando adaptarse a una realidad que es difícil de aceptar y una muerte que es díficil de procesar.

Quiero invitarte a considerar algunos aspectos que pueden ayudarte a transitar, sostener y elaborar poco a poco este duelo y darle un espacio en tu vida de una manera que honre el amor que sientes por tu hijo, su vida y su muerte.

* Permítete sentir: El llanto, la tristeza profunda, la ansiedad y el desespero son formas en que tu ser expresa el dolor de la pérdida. No hay que reprimirlas ni juzgarlas. Si sientes que quieres llorar, gritar o hablar de tu hijo, hazlo las veces que sea necesario, hace parte de tu vinculo con él y de aceptar la ausencia y de la manera en que lo estás procesando interiormente.

*Busca redes de apoyo que te nutran y sostengan emocionalmente: Aunque mencionas que eran solo tú y tu hijo, es importante abrir espacios donde puedas sentirte acompañada, acogida, validada y abrazada. Tal vez tengas familiares, amistades o personas significativas con quienes hablar. También puedes considerar buscar apoyo terapéutico especializado en duelo o en grupos de acompañamiento para padres que han perdido a sus hijos. Compartir tu dolor puede aliviar la carga.

* Crea rituales en memoria de tu hijo: El amor por tu hijo no desaparece, se transforma. Puedes crear pequeños rituales, como encender una vela, escribirle cartas, mirar fotos, hablarle en voz alta, visitar algunos lugares que a los dos les gustaban. Estos actos permiten mantener el vínculo simbólico y honrar la relación única que compartieron. Puedes agradecer por su vida, por los momentos compartidos, por las enseñanzas que él te dejo y preguntarte, si él te pudiera responder, cómo le gustaría que vivas tu vida después de su partida.

*Intenta cuidar de tu cuerpo: Aunque ahora puede ser difícil, intenta encontrar momentos para comer algo ligero, descansar aunque no puedas dormir profundamente, salir a caminar o simplemente respirar conscientemente. El cuerpo es el vehículo que sostiene este proceso, y aunque no tengas apetito o ganas, pequeños actos de cuidado pueden ser una forma de resistir y sostenerte.

*Considera apoyo psicoterapéutico: A veces, el dolor es tan abrumador que necesitamos un espacio seguro y una persona confiable que nos ayude protegido a transitarlo y nos acompañe en el proceso. Un proceso terapéutico te permitirá entender y elaborar tu duelo en el contexto de tu historia, tus vínculos y tus recursos personales. Así como abrazar ese proceso de transformación que trae a tu vida esta pérdida, con todas sus luces y sombras.

*Tiempo y compasión: Finalmente, ten presente que no hay prisa. El duelo es un proceso que no tiene un tiempo definido y cada persona lo vive en sus propios tiempos. El dolor por la pérdida de tu hijo es algo que probablemente permanecerá, pero con el tiempo y con los recursos apropiados puede transformarse. Hoy quizás sientes que no hay salida, pero poco a poco, y con ayuda, podrás encontrar formas de abrazar ese dolor y aprender de él.

Nuevamente te abrazo y deseo que puedas ser acompañada en este proceso, lo mereces.

Te entiendo que difícil situación, te envió mucha fortaleza desde acá, así como tu lo dices el duelo hay que vivirlo y transitar por el, sin embargo empieza a reconstruir ese dolor desde como tu puedes ayudar a alguien mas como tu puedes ser la voz para mamitas que también están pasando por esto, empieza a escribir en un diario lo que sientes, cada día, midiendo tus conductas en gravedad siendo 1 muy bajito y 10 muy alto, así misma tu te darás cuenta como estas transitando este duelo.

Buenos días.
Gracias por compartir tu dolor en medio de una pérdida tan inmensa.
Perder a un hijo es una de las experiencias más devastadoras que puede atravesar un ser humano. Lo que estás sintiendo —la tristeza profunda, la ansiedad, el insomnio, la pérdida de apetito y el desgano por todo— no solo es comprensible, sino que es una expresión natural de un amor inmenso que se ha quedado sin el cuerpo del hijo para abrazar.
Tu duelo es único y merece ser acompañado con mucha delicadeza y respeto. No existen fórmulas para “superarlo”, pero sí caminos para sostenerlo, honrar la vida de tu hijo y, poco a poco, ir encontrando sentido y alivio dentro de tanto dolor.
Has hecho un primer paso muy importante al pedir ayuda. Y eso habla de tu fuerza, aunque hoy te sientas quebrada.
Como psicólogo, pongo a tu disposición mi acompañamiento profesional y humano para caminar contigo en este proceso. Juntos podemos crear un espacio en el que tu dolor tenga voz, tu hijo tenga un lugar en tu corazón, y tú puedas poco a poco volver a respirar con un poco más de paz.

No estás sola.

Buenas tardes. Lamento profundamente la pérdida de tu hijo. No hay palabras que puedan abarcar el dolor de una experiencia tan devastadora. Perder a un hijo es una de las vivencias más difíciles y desgarradoras que una persona puede atravesar, y todo lo que estás sintiendo (la tristeza intensa, el llanto, la ansiedad, el insomnio, la falta de apetito y de interés) son reacciones naturales ante un duelo tan profundo.

Lo más importante ahora no es “superar” este dolor, sino permitirte vivirlo con compasión hacia ti misma, entendiendo que el duelo no tiene tiempos fijos ni formas correctas. Tú y tu hijo tenían un lazo único, y es completamente esperable que tu mundo se sienta vacío y desorganizado.

Te acompaño a reconocer que no estás sola, aunque así se sienta. Pedir ayuda, como lo estás haciendo ahora, es un acto de valentía en medio del dolor. Podemos trabajar juntas para que este proceso tenga espacios de contención emocional, pequeñas acciones para cuidar tu cuerpo, y recursos para atravesar cada día sin presión, pero con sostén.

Por ahora, te sugiero que no te exijas “recuperarte” ni “ser fuerte”. Lo único necesario es que te permitas sentir y cuidar lo poco que hoy te sea posible sostener. Estás haciendo lo mejor que puedes en medio de una pérdida que rompe el alma.

Estoy aquí para acompañarte si deseas iniciar un proceso terapéutico, o simplemente hablar en este momento tan difícil

Un cordial saludo.
No imagino cuanto dolor hay en tu ser en estos momentos, no perdiste unas llaves sino al ser a quien diste vida y por 7 años (contando el embarazo) tuviste cerca. Te sugiero iniciar un proceso de acompañamiento psicoterapéutico que te permita llevar mejor la situación, sentirte escuchada y entendida cuantas veces sea necesario.

Buen día. Es importante que sepas que, en tu caso, los procesos de duelo son vivenciados por cada persona de forma diferente en la duración y en la intensidad, pero es indispensable que en la superación de un duelo se cuente con el acompañamiento de un profesional en salud mental. Por tanto, para determinar tu grado de afectación e iniciar el tratamiento adecuado a tu condición te invito para que ingreses a mi perfil, en el cual podrás agendar una cita y de esta manera inicies tu tratamiento psicológico, el cual te permitirá superar tu proceso de duelo.

Lamento muchísimo la pérdida de tu hijo. Lo que estás sintiendo es profundamente doloroso y totalmente comprensible; perder a un hijo es una de las experiencias más duras que una persona puede atravesar. La sensación de vacío, la ansiedad, el insomnio, la falta de apetito y la pérdida de interés son reacciones naturales frente a un duelo tan devastador, especialmente cuando tu hijo era tu mayor compañía y parte central de tu vida.

Aunque es normal sentir este dolor, también es importante no transitarlo sola. El duelo puede volverse abrumador y afectar la salud física y emocional si no se cuenta con apoyo. La terapia de duelo brinda un espacio seguro para expresar todo lo que sentís, elaborar la pérdida y aprender a reconstruir tu vida poco a poco, sin sentir que olvidás a tu hijo.

Podemos trabajar juntas para que este camino no sea tan solitario y doloroso, acompañándote en cada etapa del proceso y ayudándote a encontrar alivio emocional. Si querés, podemos agendar una sesión y empezar este proceso de acompañamiento, respetando tus tiempos y tu forma única de vivir este duelo. ¿Te gustaría que coordinemos un encuentro?

Estas pasando por un momento supremamente duro, y no tienes que atravesarlo en soledad, apóyate de tu familia, permanece un tiempo con alguien que te pueda brindar compañía. asistir a una cita psicológica te puede ayudar a fortalecer tus propios recursos para superar este momento tan doloroso.

hola... te recomiendo consultar con una especialista, debes trabajar en elaboración del duelo, esta es una situación bastante significativa en tu vida, puede desencadenarte dificultades en diferentes aspectos más adelante. te recomiendo trabajar en el manejo de tus emociones donde puedas, expresarte y ser tu misma. te recomiendo mi terapia, te brindo acompañamiento personalizado.

Lamento profundamente tu pérdida y el primer paso definitivamente es permitirte sentir el dolor. Es importante que cuentes con espacios en donde puedas verbalizar tu malestar como grupos de apoyo, terapia e incluso seres queridos que estén para ti. Igualmente apóyate de rituales que te acompañen en tu proceso de duelo cómo escribir una carta a tu hijo, hacer escritos en donde verbalices tu dolor, entre otras acciones que te permitan sentirte cerca a él y darle lugar a tus emociones.

Buenos días. Lamento con toda el alma el inmenso dolor que estás sintiendo. La pérdida de un hijo es una de las experiencias más devastadoras que una persona puede vivir, y el hecho de que hayan sido solo tú y él hace que la herida sea aún más profunda. Es completamente normal que te sientas con desespero, ansiedad y que llores desconsoladamente. Lo que estás sintiendo no es una debilidad, es el dolor más grande que existe, y es una señal de que necesitas cuidar de ti misma.

El dolor no se puede superar de la noche a la mañana, es un proceso. Pero sí hay pasos que puedes tomar para ayudarte a sanar.

Cómo empezar a sanar
Permítete sentir: El duelo por la pérdida de un hijo es el más difícil de todos. Permítete llorar, sentir el dolor, la rabia, y el desespero. No te juzgues por sentir lo que sientes.

No te aísles: Aunque sientas ganas de no ver a nadie, es fundamental que busques el apoyo de tus amigos y familiares. Habla con ellos, desahógate, o simplemente pide que te acompañen en silencio.

Cuida tu cuerpo: La pena que sientes afecta tu cuerpo. Haz un esfuerzo por dormir, comer bien y hacer ejercicio, aunque sean unos minutos. El ejercicio es un antidepresivo natural.

Busca ayuda profesional: El duelo por la pérdida de un hijo es un dolor muy grande, y la ayuda de un profesional puede hacer una gran diferencia.

¿Qué especialista debo buscar?
El mejor especialista que puedes buscar es un psicólogo o terapeuta especializado en duelo. Él o ella te puede dar las herramientas para procesar tu dolor, para manejar la ansiedad y para recuperar tu vida.

El Neurexan que estás tomando es un medicamento natural, pero es importante que no dependas solo de eso. Lo que necesitas es ir a la raíz del problema. La terapia te puede ayudar a manejar tu dolor de una manera sana.

Por favor, no te rindas. Lo que sientes es válido y tiene solución. Date permiso para sanar.

Hola! Lamento profundamente tu pérdida. Perder a un hijo es una de las experiencias más dolorosas que un ser humano puede atravesar, y lo que sientes —tristeza profunda, ansiedad, insomnio, falta de interés— es una respuesta natural al duelo. No hay un “camino rápido” para dejar de sentir este dolor, porque amar profundamente también significa sentir intensamente la ausencia. Es importante que te permitas llorar, expresar y compartir lo que sientes, sin exigirte estar bien todavía. Sin embargo, también es clave que no atravieses este proceso en soledad: un acompañamiento terapéutico especializado en duelo puede ayudarte a sostener tu dolor, encontrar recursos internos y poco a poco transformar la desesperanza en un proceso de sanación.

Mi consejo: cuida de ti en lo básico (descanso, alimentación, respiración) y busca un espacio seguro para hablar de tu hijo, de tu amor y de tu dolor. El duelo no es para olvidarlo, sino para aprender a vivir con él de manera más llevadera.

Lamento muchísimo la pérdida de tu hijo. Perder a un ser tan cercano, y más aún a un hijo, es una de las experiencias más duras que puede atravesar una persona. Lo que me compartes —el llanto, el insomnio, la falta de apetito, el desinterés— son reacciones normales en un proceso de duelo tan reciente e intenso. Tu dolor tiene sentido, porque refleja el amor inmenso que sentías por él y la ausencia tan grande que dejó en tu vida.

Desde la Terapia Breve Estratégica vemos el duelo como un camino que no se trata de olvidar, sino de aprender a relacionarte de una nueva manera con tu hijo en tu interior. No es sencillo, pero sí es posible transformar ese dolor insoportable en un vínculo distinto, que te permita seguir adelante sin sentir que lo abandonas.

Algunas ideas iniciales que pueden ayudarte:

Permítete llorar cuando lo necesites, sin juzgarte ni frenarlo; es una forma natural de procesar.

Evita aislarte totalmente: aunque no tengas ganas, un poco de contacto con alguien de confianza puede darte sostén.

Rutinas pequeñas: mantener gestos simples como salir a caminar, alimentarte de forma ligera o respetar un horario para dormir ayudan a que tu cuerpo acompañe tu proceso emocional.

Y sobre todo: no tienes que atravesar esto solo. Un acompañamiento terapéutico puede darte un espacio seguro para transitar este dolor y empezar a reconstruir poco a poco.

No hay una fórmula rápida para “superar” un duelo así, pero sí hay formas de caminarlo con apoyo y sentido, hasta que la herida deje de ser tan insoportable y puedas recordar a tu hijo con amor y no solo con dolor.

Si lo deseas, podemos agendar una primera sesión. Estaré aquí para acompañarte, paso a paso, en este proceso tan humano y delicado.

Lamento profundamente tu pérdida. No hay palabras que puedan abarcar del todo el dolor de perder a un hijo, y lo que estás sintiendo, la tristeza profunda, el vacío, el desespero, la dificultad para dormir o comer, son respuestas humanas ante una pérdida tan significativa. No estás “mal” por sentirte así; estás viviendo una experiencia que transforma por completo la vida, y es natural que todo parezca detenido o sin sentido por ahora.

En este momento, más que buscar “superar” el dolor, puede ser más compasivo contigo misma permitirte acompañarlo poco a poco, reconocer que este duelo necesita tiempo, apoyo y espacios seguros donde puedas hablar de tu hijo, de lo que vivieron juntos y de lo que estás sintiendo.

Sería muy valioso que pudieras contar con acompañamiento psicológico especializado en duelo. En terapia, podrás encontrar un lugar donde tu dolor tenga voz, donde no tengas que ser fuerte todo el tiempo, y donde puedas ir reconstruyendo tu vida de una manera que honre el amor por tu hijo sin sentir que lo estás dejando atrás.

Mientras tanto, intenta cuidar lo básico: mantener rutinas simples, alimentarte aunque sea poco, descansar cuando tu cuerpo lo permita, y apoyarte en personas de confianza. No estás sola, y buscar ayuda no significa debilidad, sino reconocer que este camino necesita sostén y acompañamiento.

Hola, si es normal esos sentimientos por la pérdida de tu hijo. Debes darle paso a tu dolor porque es normal, inicia una rutina de ejercicios y buena alimentación, también la relajación y respiración consciente puede ayudar, pero en estos procesos se debe dar tiempo para superar el dolor, pero la ausencia siempre estará presente.

Hola Hola, un gusto saludarte.
Gracias por abrir tu corazón y compartir un momento tan doloroso. Perder a un hijo es una de las experiencias más difíciles que puede atravesar una persona, y lo que describes desespero, ansiedad, insomnio, falta de apetito y pérdida de interés son manifestaciones frecuentes en un proceso de duelo tan reciente e intenso. Es importante reconocer que tu dolor es legítimo y que llorar, extrañar y sentir desesperanza forman parte de la manera en que la mente y el cuerpo intentan adaptarse a una pérdida tan significativa.
El duelo no tiene un tiempo exacto ni una forma única: cada persona lo vive de manera distinta. Sin embargo, hay pasos que pueden ayudarte a transitarlo con más acompañamiento y cuidado. Lo primero es no vivirlo en soledad: buscar apoyo psicológico especializado en duelo puede darte un espacio seguro para expresar tu dolor y aprender estrategias para sobrellevarlo. También es recomendable mantener contacto con familiares, amigos o grupos de apoyo, ya que compartir lo que sientes puede aliviar la carga emocional.
En cuanto a los síntomas físicos como el insomnio y la falta de apetito, es fundamental que lo converses con tu médico para asegurarte de que tu salud esté protegida y recibir orientación sobre el manejo adecuado. El uso de medicamentos o suplementos debe estar siempre supervisado por un profesional de la salud.
Algunas prácticas sencillas pueden ayudarte poco a poco: establecer rutinas de sueño y alimentación aunque sean básicas, realizar actividades suaves que te conecten con el presente (como caminar, escribir o escuchar música), y permitirte momentos de recuerdo y homenaje a tu hijo, que pueden convertirse en rituales de amor y conexión.
Recuerda que pedir ayuda no significa debilidad, sino reconocer que este dolor necesita acompañamiento. El duelo es un proceso, y aunque ahora se siente abrumador, con apoyo y cuidado podrás encontrar formas de seguir adelante honrando siempre el vínculo con tu hijo.

Primero lo siento fácil hablar si no estoy en tus zapatos, tengo un hijo de tu edad Y no me imagino eso. Esto no se sana con consejos. Menos con medicamento. Necesario un proceso terapéutico específico y especializado.